Tanques de Depósito de Crudo y Derivados
El Problema: La corrosión en los tanques de depósito es un problema serio y costoso. Las estructuras metálicas en los terminales de depósito, incluyendo los tanques, las tuberías tanto enterradas como sumergidas, las bombas, válvulas, plataformas y otros muchos otros elementos están expuestos a la corrosión. Los daños provocados por la corrosión a estas estructuras van desde el aspecto puramente estético hasta derrames de líquidos con la consiguiente polución del medio ambiente, que ocasionan constantes y costosos trabajos de mantenimiento a los propietarios y a los trabajadores de esas instalaciones.
La Causa: La protección de estructuras sujetas a corrosión ambiental es habitualmente realizada por medio de pinturas. Las estructuras enterradas y sumergidas son generalmente protegidas catodicamente. Probablemente, los mayores gastos de mantenimiento en los terminales de depósito petroleros es el generado por las pinturas. Para mantener el aspecto estético y también para evitar daños más costosos se requiere repintar las estructuras metálicas con bastante frecuencia. Esta frecuencia va a depender del tipo de exposición, la preparación previa de la superficie y del sistema de protacción anticorrosivo utilizado. En la mayoría de los casos estos sistemas de protección duran poco, en un corto tiempo se hace necesaria un retrabajo. Las fallas de pintura se ocasionan generalmente por una inadecuada preparación de la superficie, cura inadecuada, o alta exposición a derivados del cloro. La situación es adicionalmente agravada en ambientes industriales y poluidos donde la corrosión es aún más agresiva.
La Solución: Las capas metálicas de zinc o aluminio, sus aleaciones o combinaciones aplicadas por el proceso de metalización por arco eléctrico (arc spray) brindan una solución efectiva y de gran duración en el control de la corrosión en estructuras metálicas. Diversos estudios han demostrado que solamente las capas metalizadas pueden garantizar una protección superior a los 20 años antes de ser necesario un primer ciclo de mantenimiento en estructuras metálicas expuestas a la corrosión en diferentes ambientes industriales y marítimos. Las capas metalizadas consisten en la fusión de un determinado metal o aleación y su proyección en alta velocidad con aire comprimido sobre la estructura que se desea proteger. La capa así formada tiene excelente adherencia sobre la estructura metálica y su espesor y densidad pueden ser perfectamente controlados, resultando así una protección anticorrosiva libre de mantenimiento por muchas décadas.
Metaljet SRL fabrica y comercializa el equipo Metaljet Arc Spray 400A el que permite aplicar capas metalizadas para protección contra la corrosión en estructuras metálicas, independientemente de su forma y tamaño. Pueden ser aplicados diferentes metales y aleaciones, de acuerdo con cada problema particular de corrosión.